El Ayuntamiento de Monforte se suma mañana 8 de octubre al Día internacional de la Dislexia iluminando de azul turquesa la torre del Homenaje

Monforte de Lemos, 7 de octubre de 2024. El Ayuntamiento de Monforte se suma mañana martes 8 de octubre, Día Internacional de la Dislexia, a la campaña Unidos por la Dislexia, y para ello la torre del Homenaje de San Vicente se iluminará de color azul turquesa.

La Federación Española de la Dislexia tiene por objetivo, a través de la iluminación de edificios emblemáticos de este color azul turquesa, hacer visible este trastorno del aprendizaje que perjudica a la lectura y a la escritura. La campaña busca así sensibilizar sobre esta dificultad específica del aprendizaje que se calcula  afecta al 10% de la población mundial y busca garantizar una educación y un futuro en igualdad de condiciones y oportunidades que el resto de los conciudadanos.

“Desde el Ayuntamiento de Monforte, nos sumamos a esta iniciativa, haciéndola así extensiva a toda la ciudadanía, iluminando para ello de color azul turquesa la torre del Homenaje, pues este trastorno del aprendizaje se calcula que en España afecta a 4,6 millones de personas y a 800.000 niños y niñas de los cuales sólo el 33% recibe la atención profesional necesaria. Además, se estima que las dificultades de aprendizaje causan el 65% del fracaso escolar”, destaca el Alcalde, José Tomé Roca.

La dislexia es un trastorno del aprendizaje de la lectoescritura, de carácter persistente y específico, cuyo trazo principal es una dificultad específica y significativa en el desarrollo de las habilidades para la lectura y escritura, que no puede explicarse únicamente por la edad mental, problemas de la precisión visual o una escolarización inadecuada, según lo define la Organización Mundial de la Salud.

La dislexia es una falta de habilidad para identificar los sonidos del habla y para comprender como estos se relacionan en una estructura de significado. Puede afectar otras habilidades del lenguaje como: la ortografía, la escritura y la pronunciación de palabras. También existen dificultades de comprensión, memoria a corto plazo, acceso al léxico, confusión entre la derecha y la izquierda, así como dificultades en las nociones espacio-temporales, entre otras.

 

Según la Federación Española de la Dislexia, el principal problema que tiene la dislexia es que no es compatible con el sistema educativo actual, pues, dentro de este, todos los aprendizajes se realizan a través del código escrito, por el cual el niño disléxico no puede asimilar ciertos contenidos de materias como Conocimiento del Medio, porque no es capaz de llegar a su significado a través de la lectura. El niño/a disléxico debe poner tanto esfuerzo en las tareas de lectoescritura que tiende a fatigarse, a perder la concentración, a distraerse y a rechazar este tipo de tareas.

La dislexia, supone mucho más que tener dificultades en la lectura y en la escritura, ya que existen problemas de comprensión, de memoria a corto plazo, de acceso al léxico, confusión entre la derecha y la izquierda o dificultades en las nociones espacio-temporales.

 

La dislexia no es una enfermedad, es una condición del ser humano como cualquier otra. Aunque las causas exactas de la dislexia no están completamente claras, la neurociencia muestra que la dislexia tiene un origen neurobiológico. Afecta a las zonas del cerebro que procesan el lenguaje y la comprensión de información. Las imágenes cerebrales muestran que, cuando la gente con dislexia lee, usa partes del cerebro distintas a las que usan las personas sin dislexia.

 

La evaluación e intervención temprana produce los mejores resultados. La mayor parte de las personas con dislexia puede tener éxito en la escuela con la ayuda de un programa de enseñanza especializada, así como con los ajustes y adaptaciones metodológicas o de acceso correspondientes. El apoyo emocional también juega un papel esencial en la construcción de autoestima frente a las dificultades que presenta este trastorno del neurodesarrollo. En ocasiones, la dislexia permanece sin ser identificada hasta la etapa adulta, así que nunca es tarde para buscar ayuda y desarrollar estrategias compensatorias.

El retraso en la identificación de la dislexia afecta a la autoestima de quien la padece. Es de vital importancia reconocer los síntomas de esta dificultad de aprendizaje lo antes posible en la enseñanza primaria e iniciar una instrucción específica de inmediato. Recibir una identificación y un diagnóstico tempranos es fundamental para permitir que el alumnado con dislexia se desarrolle con el mayor éxito posible en la etapa educativa en la que se encuentre. La experiencia demuestra que de no identificar, diagnosticar e intervenir de forma temprana, las consecuencias educativas y sociales y laborales en su vida adulta pueden ser muy graves.