Monforte de Lemos, 13 de abril de 2024. El Alcalde de Monforte, José Tomé Roca, se suma a las declaraciones efectuadas por el presidente de la FEGAMP, Alberto Varela, en las que denuncia que la Xunta de Galicia empeora el convenio de las Unidades Municipales de Asistencia a la Drogodependencia (UMAD) y sigue sin cumplir los compromisos adquiridos de cobertura de jubilaciones y de asunción del personal sanitario, por parte de la Consellería de Sanidad.
Tras la reunión mantenida el pasado 3 de abril en Santiago entre los trece ayuntamientos que cuentan con Unidades Municipales de Asistencia a la Drogodependencia (UMAD) y la Federación Gallega de Municipios y Provincias (FEGAMP), en la que participó la Teniente de Alcalde, Gloria Prada, el Ayuntamiento de Monforte rechaza la propuesta recibida desde la Xunta de Galicia para renovar el convenio dirigido a cubrir los costes de este servicio por parte de estos ayuntamientos, un rechazo que se acordó por parte de los ayuntamientos participantes en la citada reunión.
Este rechazo, al que se sumaron el resto de Ayuntamientos además del de Monforte, se presentó en la reunión de la comisión de seguimiento de este convenio mantenida el 4 de abril entre representantes de la Vicepresidencia Primera y Consellería de Presidencia, Justicia y Deportes, y de la Consellería de Sanidad, por parte de la Xunta de Galicia, y una delegación de la FEGAMP encabezada por su secretaria general, Patricia Vilán.
En esa misma reunión, desde la FEGAMP también se acercó el malestar unánime de los trece ayuntamientos con UMAD por el continuo incumplimiento de la Xunta de Galicia de sus compromisos adquiridos desde 2022, por los que la Consellería de Sanidad cubriría de forma directa las vacantes de personal sanitario de las UMAD que se vayan produciendo por motivo de jubilaciones y que en el plazo de 3 a 5 años, la Consellería de Sanidad asumiría todo el personal sanitario de las UMAD.
El Alcalde de Monforte hace suyas las declaraciones del presidente de la FEGAMP, Alberto Varela, en las que señala que “estos incumplimientos de la Xunta de Galicia están afectando negativamente al servicio que se presta por lo que aún cuesta más entender por que se está forzando esta situación en la que los más perjudicados son los usuarios de las UMAD de toda Galicia”.
Por parte de la 1ª Teniente de Alcalde, Gloria Prada, que asistió a la reunión de 3 de abril con la FEGAMP, en representación del Alcalde, transmitió en la misma estar de acuerdo con las manifestaciones del presidente de la FEGAMP, y recalcó que “el Ayuntamiento de Monforte, no puede seguir asumiendo competencias impropias y se le debe exigir a la Xunta de Galicia el cumplimiento del cronograma de acciones al que se comprometió y que asuma las UMAD de los 13 ayuntamientos que las albergan”.
Esta posición se adoptó en una reunión previa mantenida en la FEGAMP en la que participaron los trece ayuntamientos con UMAD: Carballo, Noia, Ribeira y Santiago de Compostela (A Coruña); Burela y Monforte de Lemos (Lugo); Ourense (Ourense); Cangas, O Grove, Pontevedra, O Porriño, Vigo y Vilagarcía de Arousa (Pontevedra).
En esta reunión se evaluó negativamente la propuesta recibida desde la Xunta de Galicia para el nuevo convenio, en el que el importe contemplado en el mismo para la cobertura de los costes del servicio apenas supera los 4 millones de euros anteriores, lo que supone un grado de cobertura de aproximadamente el 70% del gasto total que suponen las UMAD, que la propia Xunta de Galicia reconoce como competencia autonómica, pero que finalmente tienen que volver a ser los ayuntamientos los que garantizan el servicio invirtiendo recursos propios.
Pero la propuesta de nuevo convenio aún empeora las condiciones anteriores, ya que además de seguir sin cubrir el total del coste ahora la Xunta de Galicia pretende diferir el pago en dos plazos condicionados. Esto supone que los trece ayuntamientos con UMAD no solo tendrían que financiar buena parte de un servicio que es competencia autonómica, sino que también tendrían que esperar más tiempo y realizar dos justificaciones para poder recibir la cuantía económica desde la Xunta de Galicia.
Por lo anterior y de manera unánime los trece ayuntamientos decidieron rechazar la propuesta que empeora las condiciones del convenio anterior, y denunciar públicamente el incumplimiento permanente por parte de la Xunta de Galicia de los compromisos adquiridos en junio de 2022, en un cronograma presentado por la Xunta que preveía la asunción de las UMAD en enero de 2024 después de la aprobación del decreto de transferencia en diciembre de 2023. En este sentido, el Alcalde explica que en ese año 2022 “se estableció un cronograma de actuaciones en relación con las UMAD, que fue incumplido constantemente por la Xunta de Galicia y la Consellería de Sanidad”.
Estos compromisos fueron fruto de más de veinticinco reuniones mantenidas con la Consellería de Sanidad desde la FEGAMP y los trece ayuntamientos que disponen de UMAD, y de la resolución aprobada en el Parlamento de Galicia en marzo de 2021, en la que se “insta a la Xunta de Galicia a que se acuerde con la FEGAMP el mecanismo para iniciar el procedimiento de incorporar al Servicio Gallego de Salud los profesionales y servicios sanitarios de salud mental que prestan los servicios dependientes de las administraciones locales, para ordenar la atención y que dependa del organismo competente en asistencia sanitaria, que es la administración autonómica”.
El Alcalde de Monforte considera que “esta situación es muy grave, por lo que emplazamos al nuevo gobierno de la Xunta de Galicia a cumplir con los compromisos adquiridos con urgencia para garantizar la calidad del servicio que se presta", y exige "una reunión con el nuevo conselleiro de Sanidad en cuanto haya tomado posesión de su cargo con el fin de retomar la aplicación de los compromisos adquiridos en el cronograma”.
La grave situación de la UMAD de Monforte
El Ayuntamiento de Monforte cuenta con UMAD desde el año 1.989, y en los últimos años atraviesa una situación complicada motivada por la falta de psiquiatra desde hace 3 años. Porque, a pesar de que el Ayuntamiento llevó a cabo 2 procesos selectivos, después de que la anterior psiquiatra pidiese la excedencia en su puesto de trabajo, en ninguno de ellos logró cubrirse la plaza, ya que ningún médico quiso asumirla.
Esto generó un perjuicio muy grave para los usuarios del servicio, y también provoca una carga física y emocional para los trabajadores de la UMAD de Monforte, que se ven impotentes para dar respuesta a las necesidades tan acuciantes que presentan los pacientes.
Por eso, desde el Ayuntamiento se hace hincapié en que la Xunta de Galicia tiene que tener en cuenta la importancia de este factor humano, tanto de los usuarios como de los profesionales de la UMAD.
Esta situación y estas circunstancias de la UMAD de Monforte, le fue trasladada en diversas reuniones por parte de la 1ª Teniente de Alcalde, Gloria Prada, y de la profesional de la UMAD de Monforte, a la responsable del servicio de la Consellería de Sanidad, María Tajes, que es sabedora de los problemas de esta UMAD monfortina.
Desde el Ayuntamiento “estamos asumiendo competencias que no son propias de esta entidad municipal, ya que las competencias en sanidad le corresponden a la Xunta de Galicia” y se está haciendo una considerable inversión económica para el mantenimiento de esta UMAD, a fin de prestar el mejor servicio a sus usuarios.
En este sentido, la asunción de estas competencias que le son impropias, obliga también al Ayuntamiento a adelantar el dinero para propiciar el funcionamiento de este servicio, algo que tendría que anticipar la propia Consellería de Sanidad.
En el caso de la UMAD de Monforte, al igual que ocurre con los otros 12 ayuntamientos gallegos, presta servicio no sólo al municipio monfortino, sino también a los ayuntamientos de A Pobra do Brollón, Bóveda, Carballedo, O Courel, Chantada, O Saviñao, Ferreira de Pantón, Quiroga, Ribas de Sil y Sober.
Con la situación actual, muchos de estos usuarios, por falta de psiquiatra, tienen que desplazarse a Lugo, puesto que el Hospital Comarcal de Monforte tiene una larga lista de espera en este servicio de psiquiatría, motivada por la falta de especialistas.